¿Qué es la agricultura de precisión?

La agricultura de precisión es el compendio entre la última tecnología del mercado y la experiencia humana para mejorar la productividad de los cultivos y disminuir el impacto medioambiental, aumentando la rentabilidad y reduciendo el riesgo y los costes, sin afectar la calidad del cultivo.

Gracias a la irrupción de la tecnología en el campo, se pueden tomar decisiones fundamentales en tempo real, mediante sensores, drones o satélites. Todo esto no viene a sustituir el factor humano, imprescindible en todo momento, no obstante, es una herramienta muy potente para la ayuda en la toma de decisiones.

Una de las aplicaciones más interesantes y en auge, en la agricultura de precisión, es el uso de los drones y la monitorización de forma precisa y en tempo real de los cultivos.

Beneficios de la agricultura de precisión

Algunos de los beneficios de la aplicación de la agricultura de precisión:

Reducción costes producción y mayores rendimientos:

la agricultura de precisión mediante el uso de drones permite a los agricultores optimizar sus prácticas agrícolas. Los drones equipados con tecnología avanzada, como cámaras multiespectrales y sensores de infrarrojos, pueden recopilar datos detallados sobre las condiciones del suelo, la humedad, la salud de las plantas y otros factores relevantes. Estos datos permiten una gestión más precisa de los cultivos al proporcionar información valiosa sobre el momento adecuado para el riego, la aplicación de fertilizantes y la detección temprana de enfermedades o plagas. Al utilizar drones para monitorear y administrar los cultivos de manera más eficiente, los agricultores pueden reducir los costes asociados con la aplicación indiscriminada de insumos agrícolas y maximizar los rendimientos. Al conocer las necesidades específicas de cada área del campo, es posible aplicar los recursos de manera precisa y evitar desperdicios innecesarios.

Mejorar impacto medioambiental y rentabilidad:

La agricultura de precisión con drones ayuda a mejorar el impacto medioambiental al reducir la cantidad de productos químicos y otros insumos utilizados en la producción agrícola. Al recopilar datos precisos sobre la salud de las plantas y las condiciones del suelo, los drones permiten una aplicación más selectiva de fertilizantes, pesticidas y herbicidas. Esto significa que se pueden aplicar únicamente en las áreas que realmente los necesitan, minimizando la dispersión de productos químicos y reduciendo el riesgo de contaminación del suelo y del agua. Además, al optimizar el uso de insumos agrícolas, los agricultores pueden reducir los costes asociados y mejorar la rentabilidad de sus operaciones. Al evitar la sobreaplicación de productos químicos, no solo se benefician económicamente, sino que también contribuyen a la protección del medioambiente y la salud humana.

Identificar realmente la cantidad de fertilizantes, pesticidas y herbicidas y los sitos puntuales donde aplicarlos.

Los drones equipados con sensores de alta resolución pueden recopilar datos detallados sobre las condiciones del suelo y las necesidades nutricionales de los cultivos. Estos datos permiten a los agricultores identificar con precisión la cantidad de fertilizantes, pesticidas y herbicidas necesarios para cada área específica del campo. Al conocer las necesidades exactas de cada planta, los agricultores pueden evitar la sobreaplicación o subaplicación de productos químicos, asegurando una nutrición adecuada y un crecimiento saludable de los cultivos. Además, los drones pueden mapear las áreas problemáticas, como zonas infestadas de malezas o con plagas, permitiendo una intervención puntual y precisa. Al aplicar los insumos agrícolas solo en los lugares necesarios, se minimiza el desperdicio y se maximiza la eficiencia de la aplicación, lo que resulta en una gestión más efectiva y económica de los cultivos.

Evita daño a los cultivos y beneficia al medioambiente.

Los drones desempeñan un papel importante en la detección temprana de enfermedades, plagas y condiciones adversas en los cultivos. Al utilizar cámaras y sensores especializados, los drones pueden identificar signos de estrés o enfermedades en las plantas antes de que sean visibles a simple vista. Esto permite a los agricultores tomar medidas preventivas y mitigar los problemas antes de que se propaguen y causen daños significativos a los cultivos. Al intervenir de manera oportuna y precisa, se evitan pérdidas económicas y se reduce la necesidad de aplicar grandes cantidades de pesticidas o herbicidas para controlar las plagas o malezas. Esto beneficia tanto a los cultivos como al medioambiente, ya que se minimiza el uso de productos químicos y se fomenta un enfoque más sostenible en la producción agrícola.

Aplicaciones concretas del uso de drones en la agricultura de precisión

A continuación, se detallan algunas de las aplicaciones de los drones en la agricultura de precisión:

Control preciso y en tiempo real de los cultivos:

los drones equipados con cámaras y sensores avanzados permiten un monitoreo detallado y en tiempo real de los cultivos. Al volar sobre los campos, los drones capturan imágenes de alta resolución que proporcionan información valiosa sobre el estado de las plantas, la salud de las hojas, el crecimiento y otros parámetros importantes. Estos datos se procesan y analizan para generar informes precisos y actualizados sobre el estado de los cultivos. El control preciso y en tiempo real de los cultivos permite a los agricultores detectar problemas potenciales de manera temprana y tomar medidas correctivas de manera oportuna. Esto incluye la identificación de áreas de estrés, la detección de deficiencias nutricionales, la supervisión de la madurez de los cultivos y la planificación adecuada de la cosecha. Al contar con información actualizada y precisa, los agricultores pueden optimizar sus decisiones de manejo y maximizar el rendimiento de sus cultivos.

Detección de estrés hídrico:

el estrés hídrico es un problema común en la agricultura, y puede tener un impacto significativo en la salud y el rendimiento de los cultivos. Los drones equipados con sensores de infrarrojos y cámaras térmicas pueden detectar patrones de temperatura y firmas espectrales que indican estrés hídrico en las plantas. Estos datos ayudan a los agricultores a identificar áreas específicas del campo que requieren riego adicional o ajustes en la gestión del agua. Al utilizar drones para detectar el estrés hídrico, los agricultores pueden aplicar estrategias de riego más eficientes y precisas. Esto no solo conserva el agua, un recurso valioso, sino que también evita el riego excesivo o insuficiente, lo que puede afectar negativamente el rendimiento de los cultivos.

Teledetección de posibles plagas y enfermedades del cultivo:

los drones equipados con cámaras multiespectrales y sensores especializados pueden identificar patrones y características específicas de las plantas que indican la presencia de plagas o enfermedades. Estos drones pueden capturar imágenes de alta resolución y analizarlas mediante algoritmos de procesamiento de imágenes para detectar signos tempranos de infestación o estrés causado por enfermedades. La teledetección de plagas y enfermedades permite a los agricultores tomar medidas rápidas y precisas para controlar y mitigar el problema antes de que se propague y cause daños significativos. Al identificar áreas afectadas de manera temprana, los agricultores pueden aplicar tratamientos específicos en esas áreas, evitando la necesidad de aplicar productos químicos de manera generalizada en todo el campo. Esto reduce los costes y minimiza el impacto ambiental.

Estación de producción anual:

los drones pueden ayudar en el proceso de establecimiento de cultivos al proporcionar una visión detallada de los campos antes de la siembra. Al tomar imágenes aéreas y recopilar datos sobre la topografía, la textura del suelo y otros factores relevantes, los drones pueden ayudar a los agricultores a planificar la distribución y la disposición óptima de los cultivos. Al utilizar drones para mapear y analizar los campos antes de la siembra, los agricultores pueden optimizar la planificación de la estación de producción anual. Esto incluye la selección adecuada de cultivos, la determinación de los mejores lugares para cada tipo de cultivo y la identificación de áreas problemáticas que requieren atención adicional antes de la siembra. Este enfoque basado en datos ayuda a maximizar la eficiencia de los recursos y a mejorar el rendimiento general de la estación de producción.

Adaptación del sistema de riego:

el uso de drones en la agricultura de precisión permite a los agricultores adaptar y ajustar sus sistemas de riego de manera precisa. Al recopilar datos sobre las condiciones del suelo, el contenido de humedad y otros parámetros, los drones pueden ayudar a determinar la cantidad y el momento adecuados para la aplicación de agua en los cultivos. La adaptación del sistema de riego basado en datos de drones ayuda a optimizar el uso del agua y minimizar el desperdicio. Al proporcionar información en tiempo real sobre las necesidades de riego de los cultivos, los agricultores pueden programar y ajustar sus sistemas de riego de manera precisa, evitando el riego excesivo o insuficiente. Esto conduce a una gestión más eficiente del agua y contribuye a la sostenibilidad de las operaciones agrícolas.

Conteo de plantas y supervisión de su crecimiento:

los drones pueden ser utilizados para contar plantas y supervisar su crecimiento a lo largo del ciclo de cultivo. Al capturar imágenes aéreas de alta resolución y utilizar algoritmos de análisis de imágenes, los drones pueden contar automáticamente el número de plantas presentes en una parcela y proporcionar información sobre su tamaño y desarrollo. Este monitoreo preciso del crecimiento de las plantas permite a los agricultores evaluar la densidad de plantación, identificar áreas con baja germinación y medir el desarrollo de los cultivos a lo largo del tiempo. Esto ayuda a los agricultores a tomar decisiones informadas sobre el manejo de los cultivos, como la aplicación de fertilizantes, la poda o la cosecha en el momento adecuado.

Teledetección temprana de malas hierbas:

las malas hierbas pueden competir con los cultivos por nutrientes, agua y luz solar, afectando negativamente su crecimiento y rendimiento. Los drones equipados con cámaras y sensores especializados pueden ayudar a identificar y mapear la presencia de malas hierbas en los campos. Al detectar las malas hierbas de manera temprana, los agricultores pueden tomar medidas preventivas y aplicar métodos de control específicos, como la aplicación localizada de herbicidas o el uso de técnicas de manejo integrado de plagas. Esto reduce la necesidad de aplicar productos químicos en todo el campo y minimiza los daños a los cultivos.

Creación de mapas de rendimiento:

la agricultura de precisión con drones permite crear mapas detallados de rendimiento de los cultivos. Al utilizar sensores y cámaras especializadas, los drones pueden recopilar datos sobre la productividad de los cultivos en diferentes áreas del campo. Estos datos se utilizan para generar mapas de rendimiento que muestran la variabilidad espacial de los rendimientos en el campo. Los agricultores pueden utilizar estos mapas para identificar áreas de bajo rendimiento y áreas de alto rendimiento, lo que les permite tomar decisiones informadas sobre la gestión de los cultivos, la aplicación de insumos y la planificación futura.

Diagnóstico del cultivo:

los drones pueden realizar un diagnóstico detallado de los cultivos mediante el análisis de imágenes y datos recopilados de manera no invasiva. Al utilizar cámaras multiespectrales y sensores especializados, los drones pueden detectar signos tempranos de estrés, deficiencias nutricionales o enfermedades en las plantas. El diagnóstico del cultivo proporciona información valiosa para los agricultores, permitiéndoles tomar medidas correctivas de manera oportuna y precisa. Al identificar problemas de salud de los cultivos, los agricultores pueden aplicar tratamientos específicos, ajustar la nutrición de las plantas y tomar decisiones informadas sobre el manejo general del cultivo. Te invitamos a ver el dossier que tenemos publicado en nuestra página

Claves para entender la agricultura de precisión

Agricultura de precisión: la combinación de software y drones para decisiones informadas en cultivos

La agricultura de precisión es una metodología que se ha desarrollado gracias a la combinación de software y tecnología de drones, y ofrece a los agricultores herramientas avanzadas para tomar decisiones informadas y eficientes en sus cultivos. Estas tecnologías permiten obtener un informe detallado y preciso, lo que facilita la toma de decisiones en el ámbito agrícola.

Imágenes detalladas y precisas: la clave de la agricultura de precisión

Una de las características clave de la agricultura de precisión es la capacidad de capturar imágenes con una resolución muy alta. El Ground Sampling Distance (GSD) o Distancia de Muestreo en Tierra, que puede alcanzar hasta 2 cm por píxel, permite obtener imágenes detalladas que capturan incluso los elementos más pequeños del campo. Además, la superposición de imágenes mejora aún más la calidad de los datos recopilados, proporcionando una visión completa y precisa del terreno.

Planes de vuelo eficientes: optimización del recorrido de los drones en la agricultura de precisión

El software utilizado en la agricultura de precisión también permite generar automáticamente planes de vuelo eficaces para los drones. Estos planes de vuelo se basan en la información recopilada previamente y en los requisitos específicos de cada área de cultivo. La simulación del plan de vuelo permite a los agricultores visualizar y optimizar el recorrido del dron antes de llevarlo a cabo, lo que garantiza una cobertura completa y eficiente del área objetivo.

Mapas de salud de cultivos: identificación y monitoreo de áreas problemáticas

Además de la captura de imágenes, la agricultura de precisión también implica la creación de mapas para evaluar la salud de los cultivos. Utilizando algoritmos y análisis avanzados, los agricultores pueden identificar y monitorear áreas problemáticas en sus campos, como enfermedades, deficiencias nutricionales o estrés hídrico. Estos mapas de salud de los cultivos proporcionan información valiosa que permite tomar medidas preventivas o correctivas de manera oportuna.

Ortomosaicos: la transformación de imágenes en una vista georreferenciada para análisis agrícolas

Otra aplicación importante de la agricultura de precisión es la transformación de las imágenes capturadas en ortomosaicos. Los ortomosaicos son imágenes compuestas que se crean a partir de la superposición y procesamiento de múltiples imágenes aéreas. Estas imágenes proporcionan una vista georreferenciada en dos dimensiones (2D) del campo, lo que facilita el análisis y la toma de decisiones basadas en la ubicación exacta de los elementos del terreno.

Modelos de terreno 3D: optimizando la gestión agrícola con agricultura de precisión

Además de los ortomosaicos en 2D, la agricultura de precisión también permite generar modelos de terreno en tres dimensiones (3D). Estos modelos ofrecen una representación tridimensional del campo y proporcionan información adicional sobre la topografía, la pendiente y otros aspectos del terreno. Los modelos de terreno 3D son especialmente útiles para la planificación de la gestión de agua, la evaluación de la erosión del suelo y la optimización de la maquinaria agrícola.

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